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En un momento definitorio, cuando las necesidades del cultivo de maíz trepan por encima de los 120 mm en las zonas de Santa Fe y Córdoba, está ingresando la tormenta que puede hacer un quiebre en la campaña 16/17. Aparte, con estas lluvias se juega la posibilidad de implantar 250 mil hectáreas pendientes, entre sojas de segunda y maíces tardíos. Hasta las 8 de la mañana Pinto registraba 54 mm, María Teresa 52, Rojas 44, y en Pergamino hacia las 9 se alcanzaban los 30 mm. En la provincia de Córdoba se están dando las condiciones necesarias para que a partir del domingo lleguen las tan ansiadas lluvias. Empiezan así cinco días claves para el ciclo de granos gruesos, cinco días donde la actuación de un importante sistema frontal puede cambiar el destino de las siembras suspendidas y evitar la caída de la productividad de la región central del país.

Desde la entidad gremial consideran que el ajuste tarifario propuesto por el Ejecutivo “es claramente excesivo, de acuerdo a la inflación acumulada desde la reciente actualización de junio”.

Según un estudio del INTA Oliveros, en esa zona se hace un 15% de doble cultivo trigo/soja, 71% de soja de primera y 14% de maíz.

Las lluvias acumuladas desde el pasado fin de semana repusieron humedad en extensas áreas de la región agrícola. Pese a ello, sectores de Córdoba y del Centro y Sudeste de Buenos Aires, solo recibieron escasos milímetros que no son suficientes para reabastecer los cuadros y garantizar la humedad necesaria para la implantación de lotes de soja remanentes.
 
Puntualmente en la región Sudeste de Buenos Aires la ventana de siembra de soja de segunda se extiende hasta el 10 de enero y gran parte de esta superficie podría quedar afuera de la rotación si no se registran lluvias durante las próximas semanas que reviertan la actual condición de déficit hídrico. Por lo que podría generar recortes de la actual proyección de superficie de soja a nivel nacional (19,6 M Has).
 
En este contexto, la siembra a escala nacional presenta un retraso interanual de 6 puntos.

La soja se ubicó en torno a valores mínimos de un mes, mientras que los cereales registraron leves pérdidas.

Parte de las provincias de Córdoba, Santa Fe y Buenos Aires aún poseen reservas de moderadas a regulares por lo cual se esperan nuevas lluvias para continuar a buen ritmo con las labores.

De acuerdo a datos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, la siembra de la oleaginosa a escala nacional cubrió un 75,8 % del área proyectada en 19.600.000 hectáreas.

Las exportaciones norteamericanas siguen sorprendiendo a los operadores. Tanto en la soja como en el maíz los guarismos estuvieron por encima de los esperados. Sin embargo se registra una caída intersemanal que podría ser la señal de que las compras empezarían a dirigirse a Sudamérica. De todas formas, un dato a tener en cuenta es que nunca en la historia norteamericana, a esta altura de la fecha, las exportaciones de soja y de maíz habían sido tan grandes.

Se recomienda rotar los insecticidas para no generar resistencia y evitar el monocultivo de soja ya que puede promover un constante aumento de la población de insectos.

Menos personas pagarán el gravamen, pero la actualización de las escalas es moderada; los autónomos están entre los que más pierden.

Estará ubicado sobre el Río Paraná, en Corrientes; será financiado íntegramente por el Estado Nacional y se estima que las obras estarán finalizadas a mediados del 2018.

Así lo estimaron las autoridades de la Cámara que nuclea al sector en el marco de un balance del 2016.

En el inicio de la perspectiva, continuarán soplando los vientos del norte, manteniendo el tiempo húmedo, cálido y nublado, en la mayor parte del área agrícola, y dando condiciones predisponentes para la ocurrencia de precipitaciones y tormentas. Debido al aporte de calor y humedad de los vientos del norte, se producirán precipitaciones de frente caliente, es decir sin que baje apreciablemente la temperatura, que se extenderán sobre el la mayor parte del área agrícola argentina, la mayor parte del Paraguay y la mayor parte del Uruguay. Hacia el final de la perspectiva, tendrá lugar una irrupción de vientos del sudoeste, que causarán un marcado descenso de la temperatura en la mayor parte del área agrícola.

Los analistas aseguran que el cereal local es cinco o diez dólares más barato que el de esos países.

Arranca la jornada con pocas novedades. La soja sigue deslizándose a la baja siguiendo el clima sudamericano, a pesar de señales de buena demanda. En maíz también se pone el foco en una gran cosecha combinada de Brasil y Argentina que podría dificultar exportaciones de EEUU en los próximos meses. El trigo logra recuperar algo, pero con dificultad.
 
Volviendo al clima, el mercado removió la prima climática Argentina, ante las lluvias anunciadas. Veremos finalmente cómo se darán las mismas. Sin embargo falta mucho todavía para sortear el momento clave local, y los pronósticos de más largo plazo sostienen la posibilidad de que falten lluvias. Mientras tanto en Brasil los cultivos vienen bien.
 
Por el lado de la demanda, con la baja de precios vuelven a aparecer compras Chinas a diaria. Sin embargo los operadores están enfocados en que los negocios están empezando a ser originados desde Sudamérica, y en que el país asiático habría anticipado compras por el feriado próximo del año nuevo lunar. De todos modos antes de la apertura se publicarán datos de exportaciones semanales de EEUU que podrían inspirar algún movimiento adicional.