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Por Prensa fyo - El Pais( Uruguay).-  Fernando Villamil, operador de la empresa Agrosud aseguró a El País (Uruguay) que "los pocos saldos de soja que se están comercializando, se venden en el eje de US$ 440 o US$ 450 por tonelada puesta en Nueva Palmira", mientras que por soja nueva, se están haciendo algunos negocios en el eje de US$ 385 por tonelada, con entregas pactadas para abril de 2015.
 
Gran parte de la soja correspondiente a la campaña agrícola que pasó ya estaba vendida con antelación e incluso a mejores valores. Antes de que terminaran las cosechas prácticamente estaba toda vendida.
 
Ayer Villamil confirmó que "son muy pocas" las ventas de soja anticipada. "En general es una estrategia de los productores para asegurarse algún insumo y para ir construyendo el precio final", por lo que, más allá de estos pocos negocios, el mercado mundial de granos muestra signos de tranquilidad.
 
Se estima que en esta campaña agrícola el área de soja en Uruguay será muy similar a la registrada en el año agrícola anterior -estuvo entre 1,5 millones y 1,8 millones de hectáreas-, donde debido a problemas climático las de primera siembre anduvieron muy bien y las de segunda se vieron más afectadas, con menores rendimientos.
 
Por otro lado, en nuestro país, los márgenes de producción actuales no llegan siquiera al nivel mínimo para esquivar la pérdida de dinero, obligando a una detallada revisión de las cuentas para asegurar la sustentabilidad de este sector clave de la economía nacional.
 
Trigos en Uruguay
 
En tanto, en el caso del trigo, el mercado de exportación está prácticamente nominal (sin cotizaciones), porque según dijo Villamil, "hay muy poca demanda con los precios que tiene la oferta. Con los valores de hoy el destino, exclusivamente, sería Brasil y quedamos fuera de cualquier otro mercado".
 
Por ahora -según argumentó el operador-, hay muy poco interés en comprar trigos en el Mercosur a nivel de los importadores brasileños.
 
En paralelo, continúa ingresando trigo extra región a Brasil, política criticada por las gremiales de productores de la región. Esos ingresos de trigo extra zona, "pertenecen a negocios que ya se habían hecho. Las compras de trigo nuevo están paradas", dijo Villamil.
 
Los valores del cereal y los problemas climáticos generaron que se plantara menor área que el año pasado, pero ese dato todavía es una incógnita. En ese sentido, la oleaginosa es la que sigue pagando las cuentas.
 
Por ahora los cultivos de invierno implantados -trigo y cebada- están mostrando buenos desarrollos. En general todos están jugados a que sea un buen año para trigo y cebada.