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La Unión de Recibidores de Granos y Anexos (URGARA) lanzó un paro en los puertos agroexportadores, desde Quequén al Gran Rosario, y acusó al Centro de Exportadores de Cereales (CEC) de “falta de respuesta” a reclamos de incremento de dotación en determinados puestos de trabajo, cuando en realidad esa entidad, según consta en un acta del Ministerio de Trabajo de la Nación, realizó un ofrecimiento considerado lógico y razonable, acorde con las normas vigentes y con la normal operatoria portuaria.
 
En este sentido, fuentes del sector recmarcaron que "el CEC no negocia salarios por no ser signataria del convenio colectivo con URGARA, a pesar de algunas informaciones que confunden la índole de los reclamos involucrados".
 
"URGARA señaló que esa entidad empresarial “se niega a cumplir con el Convenio Colectivo de Trabajo Nº 407/05”, lo que el CEC, en la audiencia realizada en la víspera en el Ministerio de Trabajo de la Nación, rechazó de plano, exhibiendo pruebas al respecto", señalan las fuentes.
 
En tanto, el sindicato reclamó incrementar las dotaciones de su personal por sobre las establecidas en los convenios colectivos existentes, desembocando en una pretensión desmedida a raíz de una interpretación caprichosa del Convenio Colectivo, "cuya redacción carece de precisiones y por ello el Ministerio de Trabajo deberá laudar al respecto".
 
"Esta pretensión además de no corresponderse con los acuerdos convencionales, pretende invadir áreas de trabajo que claramente corresponden a otros gremios (por ejemplo, aceiteros), lo que además de los problemas sindicales asociados implicaría mayores costos de exportación, menor competitividad de los productos argentinos en el exterior y un impacto negativo sobre los productores agropecuarios", remarcan los que entienden del tema.
 
"Como consecuencia de la falta de sustento legal de la medida adoptada por el gremio, la paralización de actividades iniciada hoy es considerada ilegítima por lo que el Ministerio de Trabajo de la Nación podría evaluar sanciones contra el sindicato", agregan.
 
Por último, la preocupación en el sector es muy grande dado que el paro, en principio por 24 horas pero que podría ampliarse en las próximas horas, trabaría la exportación de la cosecha de soja y sus subproductos, obstaculizando además, luego de una semana, la liquidación de divisas.