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Mark Lynas: "Los transgénicos redujeron el uso de pesticidas"
-¿Cuál es su opinión sobre el impacto que tienen las campañas ambientalistas en las decisiones políticas y en la opinión pública?
-El ambientalismo es más poderoso e influyente de lo que se cree. Sus campañas son claves para las decisiones políticas y la opinión pública en muchas áreas. Un ejemplo del impacto positivo del ambientalismo es el cambio climático. Todos los gobiernos lo tomaron seriamente y la opinión demandó acciones fuertes. Un ejemplo negativo, en cambio, es lo que dijeron sobre los organismos genéticamente modificados (OGM), que fueron prohibidos en muchos países por las campañas verdes. Esto impidió a la humanidad que tuviera una agricultura que se moviera en una dirección más sustentable. Eso es lamentable e impide a la humanidad solucionar problemas como el hambre y la pérdida de biodiversidad.
-¿Ninguno de los argumentos de las organizaciones ambientalistas tiene bases científicas?
-Los argumentos contra los OGM se presentan en un lenguaje científico, pero no tienen una base científica. Los ambientalistas que hacen campañas contra los OGM son llamados adecuadamente anticientíficos porque rechazan a los expertos que dicen que los granos transgénicos son seguros. Se parecen a los negacionistas del cambio climático. Esto es lo que hacen los grupos ambientales importantes como Greenpeace y los convierte en hipócritas. Debilita sus campañas sobre el clima también. Cualquiera puede creer en la ciencia o no, pero ellos no pueden hacer como si estuvieran recogiendo cerezas del suelo y adaptar la agenda a la ideología.
-Los productores y las industrias del agro, sobre todo en la Argentina, creen que tienen un problema de comunicación con la sociedad. ¿Está de acuerdo?
-Sí. Una de las principales razones de la reacción anti-OGM en todo el mundo es que a la gente no le gusta la agricultura moderna,piensa que es demasiado industrializada, artificial y perjudicial para el medio ambiente. Hay algo de razón en estos argumentos, a pesar de que no tienen nada necesariamente que ver con los OGM, porque en realidad pueden ayudar a mitigar estas tendencias.
-Entonces, ¿cómo deberían mejorar la comunicación?
-Los agricultores tienen que explicar por qué tienen que usar agroquímicos y maquinaria agrícola. Hay gente con la que hablo que cree que los agricultores usan pesticidas porque son como el demonio y están destruyendo la tierra. Si éste no es el caso, entonces los agricultores tienen que convencer a las personas de que están haciendo lo correcto y sólo pueden hacerlo si utilizan las mejores prácticas agrícolas. En cuanto a la agroindustria, tiene que convencer a la gente de que no está motivada únicamente por los beneficios económicos y que no destruye la forma de vida de los agricultores. Las acciones hablan más que las palabras. Esto no se resuelve con agencias corporativas de relaciones públicas.
-Cuando habla o discute con sus ex colegas de las organizaciones ambientalistas, ¿cómo reaccionan?
-Inicialmente, mis compañeros ambientalistas quedaron sorprendidos e indignados. Pero ahora que ha transcurrido un tiempo, los sentimientos se han enfriado un poco, excepto entre los extremistas. Ha quedado muy claro que la campaña anti-OGM está provocando una reacción violenta en contra de ellos. Grupos como Greenpeace se dan cuenta de que seguir trabajando contra la biotecnología es una decisión arriesgada. Esto se ve cuando se oponen a los proyectos de biotecnología humanitaria como el arroz dorado, que podría salvar miles de vidas entre las personas más pobres.
-El cuestionamiento a los transgénicos no tuvo mucho eco en la Argentina. Sin embargo, sí lo tiene la aplicación de herbicidas y otros fitosanitarios. ¿Cuál es su opinión sobre el tema?
-Hasta cierto punto estoy de acuerdo con el deseo de reducir e incluso eliminar el uso de productos agroquímicos. El proyecto que estoy trabajando actualmente en Bangladesh con la Universidad de Cornell tiene como objetivo hacer justamente esto: los agricultores que cultivan berenjena OGM han sido capaces de reducir el uso de insecticidas en hasta un 100%. Esto es genial, porque se estaban exponiendo a sí mismos y a los consumidores a las toxinas, antes de que fueran capaces de obtener una planta resistente a las plagas. Los cultivos transgénicos han reducido enormemente el uso de los pesticidas más dañinos, y continuarán haciéndolo..
“La baja de los precios internacionales de los granos y la actualización de costos nos colocan en una zona roja de la cual debemos salir de manera inmediata”, dijo el titular de la Federación de Acopiadores, Fernando Rivara.
El pasado miércoles 16, el Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, Javier Alonso participó de una reunión de la Mesa de Trabajo para la Seguridad Rural con representantes de diferentes entidades que nucléan a los productores rurales, con el objetivo de coordinar acciones para prevenir los delitos en las zonas rurales de la Provincia de Buenos Aires.
Lo resolvió la presidenta del directorio de gestión y funcionaria cercana al gobernador Axel Kicillof, Jimena López; se seguirá en el trabajo de una próxima licitación; había incertidumbre sobre la continuidad luego que trascendiera un supuesto interés del gobierno provincial de controlar un 30% de la operatoria. LA NACION - 26/09/2024
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