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Recientemente se reunieron en el Consejo Federal Agropecuario y Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe hicieron una presentación a las autoridades nacionales. ¿Nos puede contar en que consistía el planteo?
 
Carlos Fascendini: El planteo que hemos acordado con las tres provincias, en primer lugar tiene que ver con la coyuntura. Es decir, con los decretos de emergencia que se han producido por excesos hídricos. El planteo fundamental era solicitar a las autoridades nacionales la pronta declaración de esos decretos para poder tener acceso a los beneficios que establece la ley nacional de emergencia agropecuaria y la solicitud de ayuda para lograr financiación a los productores que están en emergencia. Fundamentalmente el sector lechero en el caso de la provincia de Santa Fe. También aportes para aquellos pequeños productores que no están bancarizados y después en el aspecto estructural, lo que pedimos es tratar fundamentalmente tres producciones que tenemos en común y que son las que nos preocupan: la producción triguera, la lechera y la de carne. Pedimos para esto que se reúna el Consejo Federal Pampeano que unifica a las tres provincias más Entre Ríos y La Pampa. La reunión quedó programada para el 9 de Mayo para tratar los temas que corresponden a las decisiones de política económica del país, para ver de que manera podemos llegar a un consenso para que estas provincias recuperen toda la potencialidad que tienen.
 
Desde le punto de vista de Santa Fe, cuáles serían los ejes para sustentar esta recuperación?
 
Carlos Fascendini: Nosotros pretendemos que se revise toda la política que existe sobre exportaciones, que se unifique el registro de importación y exportación para permitir ampliar los cupos de exportación y en lo posible que se haga de una manera ágil y contundente. Por ejemplo en los procesos de carne, tenemos una amplia capacidad ociosa, los frigoríficos de hoy están trabajando por debajo de su producción. Allí hay muchos trabajadores que han perdido su empleo y los productores han disminuido la cantidad de producción nacional de carne. Nosotros creemos que ahí hay una gran potencialidad de agregar valor, que no necesitamos mayores inversiones porque las mismas se encuentran ociosas y que significa un ajuste de ingreso muy importante para el país. Lo mismo ocurre con la producción lechera en donde tenemos serios problemas en la cadena de valor, donde los productores constantemente reclaman que están trabajando por debajo del costo de producción. Hay un estudio de la cadena que se realizó en el 2011 que no conocemos; estamos queriendo conocer ese estudio. Trabajar también para liberar las exportaciones, creemos que tenemos ahí un enorme potencial de crecimiento y que evidentemente las políticas nacionales de restricción para el cuidado del precio interno evidentemente no han resultado porque hoy tenemos la carne cara, escasez y un enorme perjuicio al país. Hemos caído al nivel del 7 % de exportaciones contra el 20 o el 25 % que alcanzamos en el 2005. Con el trigo lo que veníamos planteando es una revisión del régimen de retenciones porque entendemos que esta es una medida que incentiva al productor, si bien ahora se han anunciado medidas por parte de la presidenta que son importantes, todavía nos parecen insuficientes.
 
Removiendo las restricciones cuantitativas (Como las restricciones directas de exportación) alcanza para revertir la situación de deterioro de estas tres actividades?
 
Carlos Fascendini: Es un conjunto de situaciones que analizar. Evidentemente la situación actual no es la óptima, ni la adecuada, por lo tanto me parece que no podemos seguir insistiendo sobre lo mismo porque no resultan estas políticas. Hemos caído en la producción de trigo, en la de carne en las exportaciones y en la producción láctea no conseguimos que los productores perciban en la cadena de valor lo que tienen que percibir y permanentemente estamos perdiendo tambos por un gran problema social que se va a generando en los pueblos que pierden sus productores.
 
Esta situación no es nueva. ¿ Cual es la respuesta de agricultura frente a este plantéo?
 
No dio respuestas porque no lo hemos tratado a fondo, justamente por eso pedimos la reunión del Consejo Federal Pampeano para poder empezar a trabajar estos ejes sobre estas tres producciones y nosotros los que manifestamos es que para la provincia de Santa Fe, tanto la producción de carne como la de leche, son producciones estratégicas, con el alto valor agregado que las mismas significan y por el fuerte impacto que tienen en el empleo y en el aspecto social. Lo que decimos también es que evidentemente no son problemas de la producción sino que son cuestiones que hacen a la película económica, digamos que es un reclamo que supera la autoridad del ministerio de agricultura que concierne a las decisiones políticas y económicas que la nación toma.
 
En el caso de Santa Fe, ¿esta postura va a ser defendida por los legisladores de la provincia?
 
Los legisladores integran distintas expresiones políticas y no puedo hablar por ellos. Está la política del gobierno de la provincia de Santa Fe y del poder ejecutivo. Santa Fe tiene una gran base de la producción lechera y de carne muy importante y una fuerte disminución en la producción de trigo. No solo por el aspecto de la producción en si misma sino por una necesidad de conservación de suelos que siempre aconseja la rotación de cultivos, no solamente la producción del monocultivo que estamos viviendo la amplia región pampeana que nos toca. Sobre 3 millones 500 mil hectáreas aproximadamente que se siembran de soja, solo se están sembrando 450 mil de trigo.
 
¿Cuál es el ánimo del productor agropecuario que usted ve en su pueblo (“Esperanza”)?
 
El productor agropecuario se encuentra en una fuerte incertidumbre porque no hay políticas que se sostengan en el tiempo y nos impiden a seguir invirtiendo y a seguir profundizando para el mejoramiento de la producción. Una señal de esto es la adquisición de maquinarias agrícolas, no hay una respuesta que nos diga que hay un fuerte entusiasmo para desarrollar las producciones.