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Las partes – CGT San Lorenzo y Federación Aceitera por un lado, y Ciara por otro – no llegaron a ningún acuerdo en la reunión que estuvo bajo la supervisión de Noemí Rial, viceministra de Trabajo de la Nación. Es que según le dijo a punto biz Edgardo Quiroga, secretario general del sindicato de los trabajadores sanlorencino, “las empresas ofrecieron una suba del 32%, por eso no hubo ningún acuerdo. Nosotros reclamamos el 40%”.
 
Sin embargo, todavía existe una posibilidad para que los puertos de la región no se paralicen. Es que el miércoles a las 11 habrá un nuevo encuentro en Buenos Aires donde se retomarán las conversaciones. Pero desde la CGT San Lorenzo dieron el ultimatum. “De no llegar a buen puerto, se realizará un paro por tiempo indefinido para este jueves a partir de las 00 horas”
 
En un principio, y en caso de no llegar a un acuerdo, la medida de fuerza se había anunciado para el 1º de mayo. Pero el sindicalista decidó meter más presión a las empresas aceiteras antes de llegar a la reunión que se realizará dentro de 48 horas. “Está definido que se adelantará el paro si dentro de dos días no tenemos respuestas”, sentenció Quiroga.
 
Portuarios habían anunciado que la medida se implementaría en caso de no acordar un aumento del 40% que reclamaban. El pedido pretende llegar a un básico de $10.150 – actualmente es de $7.250 –. Otro de los puntos planteados era un premio anual de salario completo.
 
El paro anunciado tiene un fuerte impacto económico porque trabaría la exportación de soja, clave para el ingreso de dólares al país. La Federación Aceitera sólo talla en las plantas que están de Rosario al sur, ya que el sindicato aceitero de San Lorenzo no está involucrado en esta jugada. No obstante, si la CGT de San Lorenzo hace piquetes en el norte del Gran Rosario también trabaría las actividades en esa zona del cordón industrial.
 
La semana pasada, aceiteros se habían declarado en estado de alerta con quita de colaboraciones ante la falta de respuesta por parte de las cámaras (Ciara, Ciavec y Carbio). El Ministerio de Trabajo había dictado la conciliación obligatoria tras una reunión con la Federación Aceitera, quien tiene llegada a puertos y plantas de Rosario hacia el sur.
 
Al mismo reclamo se había plegado la CGT San Lorenzo que representa a unos 4.000 trabajadores tercerizados – vigiladores, portuarios, estibadores y obreros de la construcción –. Los mismos se encuadran en el convenio del complejo oleaginoso portuario (COPA) del Gran Rosario, el cual los deja bajo las mismas condiciones que los aceiteros.