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El 88% de los encuestados manifestó que la situación económica del país es peor que hace un año, aunque el 27% espera que mejore el que viene. A su vez, el 73% indica que la situación económico-financiera de su empresa se ha deteriorado respecto de 2014, ubicándose 10% por encima de la ratio obtenida en marzo último. El 71% indicó que es mal momento para realizar inversiones. Se trata del peor registro desde que comenzaron a realizarse estas consultas.
 
"Los resultados de la encuesta que hacemos a todos los miembros CREA, más de mil cien contestaron durante julio, no hacen más que reflejar la fuerte crisis que nuestro sector está viviendo. Algunos ejemplos: 9 de cada 10 empresarios CREA considera que la situación general del país está peor que hace un año atrás, y solamente el 27%, menos de 1 de cada 3, esperan que el próximo año sea mejor. La actividad más afectada hoy en día es la agricultura. Eso se refleja en diferentes indicadores, por ejemplo, las intenciones de siembra de trigo o el trigo sembrado es 19% menos que el año pasado, y las expectativas para el maíz son peores todavía. Los resultados nos muestran que vamos a estar 30% por debajo de la superficie sembrada en la campaña pasada.", definió.
 
En general, en la campaña agrícola 2014/15, que finaliza estos días, los encuestados observaron un incremento de los rendimientos de soja y de maíz respecto de lo planificado al momento de la siembra. No obstante este buen resultado productivo, el 38% de las empresas agrícolas registra deudas que deben ser refinanciadas. El stock de soja sin vender a julio de 2015 alcanza el 28% de la producción obtenida y resulta inferior al del año pasado. El valor correspondiente de maíz es del 36%.
 
"Si uno mira los números, todo o gran parte de lo que se deja de hacer de maíz y de trigo favorece a la superficie de la soja. Aunque, en términos generales, también notamos una reducción en el área total de agricultura del orden del 10/11%. Esto es un promedio a nivel del movimiento, que involucra a distintas regiones, pero lógicamente esta tendencia es mucho más marcada en las zonas que más comprometidas están hoy. Estas son el Chaco santiagueño, el NOA, el norte de Santa Fe, Córdoba norte; o sea las zonas más lejanas a los puertos, donde lógicamente la agricultura, principalmente por una cuestión de costos de los fletes, están más desfavorecidas.", aclaró.
 
Los resultados económicos desfavorables para las actividades agrícolas que muestra la encuesta están impulsando decisiones empresarias que afectan lo productivo, pero también tienen impacto en la actividad económica regional y del país, en los niveles de empleo, en la contratación de servicios agrícolas, en los fletes, en la operatoria de otros proveedores y en el nivel de inversión. Estas decisiones que se venían postergando se van concretando por necesidad, por no encontrar otra salida, y producen un ajuste muy duro para el campo y para las actividades relacionadas comprometiendo el desarrollo del interior.
 
"Nuestras expectativas, aunque no necesariamente medidas en esta encuesta, son que la tecnología aplicada al cultivo y a los fertilizantes disminuya. Un indicador concreto que encontramos en la encuesta que acabamos de cerrar, es que a esta altura del año una gran parte de los productores, más del 60%, todavía no ha comprado ningún insumo. Cuando a esta misma altura, pero en otros años, el grado de compromiso de compra de insumos era sustancialmente mayor.", concluyó.