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Desde empresa Monsanto aseguraron que si el Gobierno restringe el actual sistema comercial de la soja Intacta podría "atentar contra la posibilidad que hoy tiene los productores de acceder a una tecnología que a probado en el campo ser muy beneficiosa".
 
La semana pasada, el jefe de Gabinete Aníbal Fernández se refirió al proyecto de Ley de Semillas y, sin mencionarla, disparó contra Monsanto y el cobro por la tecnología en el grano que impulsa la empresa.
 
"No está bien que manu militari uno le imponga a un chacarero un contrato a firmar que ni siquiera están en condiciones de analizarlo", dijo el funcionario, y señaló que se está buscando discutir "cuándo se vende el grano, en condición de commoditie, y cuando se queda usted con la semilla para su propia siembra y para su utilización futura".
 
También habló del tema el Secretario de Agricultura, Gabriel Delgado, quien aseguró que se consensuó "con todos los actores de la cadena que todo (la tecnología) se cobre en la bolsa".
 
La voz de Monsanto
En diálogo con La Red Rural (sábados de 6 a 8 hs por Radio La Red - AM 910), el director de soja de Monsanto, Martín Gómez, negó que la compañía haya tenido acceso al borrador de proyecto de ley. "No ha habido ni un DNU, ni siquiera un borrador del proyecto de ley que hayamos visto", afirmó.
 
De todos modos, indicó que se necesita "un marco regulatorio que le de previsibilidad tanto a las empresas de semillas" como "al productor que está tomando la decisión".
 
"Monsanto ha basado todo su modelo de negocios y el traer esta tecnología a un derecho sobre la ley de patentes que está conforme a las leyes nacionales y tratados internacionales", explicó Gómez. Y admitió que "la preocupación podría ser si vemos que algunos de esos derechos se ven lesionados".
 
Pero más allá del impacto que pudiera padecer la compañía, para Gómez una decisión en ese sentido perjudicaría a los agricultores argentinos. "La tecnología ha estado demostrando que agrega valor y la preocupación mayor debería ser que una vez más que los productores argentinos podrían no acceder a este tipos e tecnología".
 
Con respecto al cobro en el grano, el hombre de Monsanto señaló que cuando los productores accedieron a la tecnología "tenían muy claro las opciones que tenían".
 
Para Gómez, a tecnología siempre es una opción. "La soja RR1 sale cero pesos, Monsanto no tiene ningún pago de regalías sobre eso. Cuando el productor optó por esta tecnología (Intacta), al mismo tiempo, tenía muy claro como podía reconocer la propiedad intelectual", reforzó.
 
De todos modos, reveló que "70% de lo que fue el reconocimiento de la propiedad intelectual pasó antes de que ni siquiera llegue el grano a algún acopio".
 
"A nosotros nos gustaría que el productor se haga de la tecnología, la use, reconozca la propiedad intelectual y no haya que controlar nada", subrayó.
 
En busca de consensos
Por otra parte, Gómez reconoció que llegar a un acuerdo sobre el reconocimiento de la investigación en la tecnología llevará tiempo.
 
"Como empresa hablamos con todos los actores, y el tema del diálogo es una cosa constante. No creo que una o dos charlas más solucionen las cosas definitivamente. Son temas que van a estar en la tema un tiempo largo. Se tienen que seguir buscando mecanismos superadores", concluyó.