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Las acusaciones se cruzan de una vereda a otra, mientras la Provincia fracasa en su intento de sentar a las partes en una mesa de diálogo. Las consecuencias de la medida de fuerza, que comenzó el 4 de julio y lleva ya 12 días, son visibles en distintos puntos de la Provincia: La parálisis del puerto de Quequén está produciendo un serio resquebrajamiento en la cadena de pagos, ya que productores, acopiadores y cooperativistas no pueden dar cumplimiento a entregas de cereal que luego permiten la cobranza de los mismos y por ende la cancelación de saldos bancarios o comerciales comprometidos, según publicó el portal InfoCielo.
Los distritos más afectados son Necochea, Balcarce, Olavarría, Tres Arroyos, Lobería, Azul y Bragado. Está, además, el daño producido por los paros y los bloqueos. En Balcarce, la empresa Mc Cain suspende personal por la falta de insumos –papas- producto de la falta de transporte y los bloqueos. El molino Tres Arroyos, de la localidad homónima, anunció la suspensión de más de 200 operarios por la misma situación. En tanto que los transportistas ya anunciaron piquetes a lo largo de la autovía 2, justo en momentos donde se incrementa el tránsito vehicular producto del receso invernal.
El conflicto data de algunos meses, cuando, en noviembre de 2012, los transportistas –es decir, los dueños de los camiones que transportan cereales- pidieron una actualización de las tarifas que perciben por su servicio, del orden del 30%. En ese momento, la contrapropuesta de parte de los dadores de carga –acopiadores y productores-, fue una mejora del 18% y nuevos encuentros para febrero de este año con miras a completar el 12% restante.
“Según nuestros análisis de costos, necesitábamos un aumento del 30%; nos dieron 18% con el compromiso firmado de sentarnos en febrero para tener el otro 12%”, dijo a INFOCIELO Miguel Aguilar, titular de ATCADE, la Asociación de Transportistas de Cereales y Afines por sus Derechos.
“Eso nunca pasó, ese 12% nunca llego, la mesa asesora de cargas nunca se formó, pese a nuestros pedidos para convocarla”, continuó Aguilar. La primera reunión se hizo ayer, convocada por la Dirección de Transporte del Gobierno Bonaerense, sin embargo los dadores de carga no se presentaron, con lo cual desataron la furia de los transportistas.
“A raíz de la reunión de ayer donde no se presento nadie, los transportistas se fueron muy enojados y han subido camiones arriba de la ruta”, advirtió, y trazó un cuadro de situación del sector: “La parte nuestra está congelada; no tenemos subsidios, somos mini empresarios, dueños de 2 ó 3 camiones, no tenemos nada. El peaje ha subido y lo pagamos, pagamos las tasas de estacionamientos, un montón de cosas”, se lamentó.
Los dadores de carga, en tanto, no dan precisiones acerca de su postura en el conflicto. Con sus principales dirigentes abocados a la campaña electoral, o a otros conflictos, como el de la leche, CARBAP y Federación Agraria no pueden dar precisiones sobre las negociaciones.
Desde CARBAP aseguraron, escuetamente, que “los dadores de carga no concurrimos a la reunión convocada por el Gobierno bonaerense porque entendieron que no estaban las condiciones dadas”, lo cual atribuyeron a un “conflicto de representatividad” dentro de los transportistas, a quienes acusaron de promover “cierres forzados producto de situaciones nada claras, donde hay sectores que se sienten amenazados o presionados”.
La voz cantante la lleva, sin embargo, la Federación de Acopiadores, que define puertas adentro la manera de continuar con el conflicto dado el cariz que tomó. “No nos podemos reunir con una parte que toma las medidas que toma”, alcanzó a sincerarse, en un breve contacto con INFOCIELO, Héctor Gripo, de esa entidad.
 
Cerca del fondo
El transporte de cargas fue desregulado en la década del 90, dejando la negociación entre dadores de carga y transportistas en manos íntegramente privadas. Así, pese a la intervención del Estado, son las partes las que definen los cuadros tarifarios, aunque los conflictos se trasladen al grueso de la población, como ocurre actualmente.
No obstante, existe en la comisión de transporte un proyecto de ley con vistas a “re-regular” la actividad de manera integral. De prosperar la iniciativa, que lleva la firma del diputado Héctor Martínez, la regulación permitiría que el establecimiento de una tarifa obligatoria y la forma en que el servicio se debe prestar.
 
Foto: Infocmpo.com.ar