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Por Leandro Pierbattisti, asesor de la Federación de Acopiadores.-  El segundo comprador mundial de trigo valora contundentemente esta suerte de “crop tour” por dos principales razones: la primera radica en el hecho de que, según lo que comentan los propios compradores, se les brinda la posibilidad de observar objetivamente el estado de los cultivos de diversos lotes (se les muestra tanto los “buenos” como los “malos”). Y la segunda, tan apreciada por todo comprador, radica en el hecho de que la Federación de Acopiadores está “en las buenas como en las malas”, independientemente de que la Argentina posea o no saldo exportable.
El objetivo de estas líneas consiste en subrayar algunos aspectos sobresalientes que nos ha dejado esta recorrida realizada entre el 3 y 6 de diciembre pasado, a fin de aportar una herramienta más de análisis para la toma de decisiones.

La recorrida
Este tour no pretende bajo ningún punto de vista arrojar un volumen previsto de cosecha por el mero hecho de que, por una parte el muestreo de lotes no es suficientemente representativo, y por otra parte, aunque el muestreo fuera representativo, el mismo no dejaría de ser regional y es difícilmente extrapolable a nivel nacional.
No obstante ello, la elección de los campos de trigo situados en Suipacha, Carlos Casares, 9 de Julio y Roque Pérez, ha sido acertada debido a su diversidad, ya que los mismos han sido sembrados tanto con variedades tradicionales como con trigos de germoplasma francés. Por otra parte, los campos visitados presentaban condiciones climáticas variadas, con lo cual los compradores han podido juzgar el estado de los cultivos en ambientes diversos (la lógica que no sólo se le muestra lo bueno).
Los campos visitados en dichos partidos presentaron un potencial de rendimiento comprendido entre 3 y 5 toneladas/has. De forma general, el estado sanitario de los cultivos es bueno, y no se manifiestan problemas de fusariosis.
Cabe destacar que el buen estado sanitario de los cultivos se debe, en buena parte, a que este año los precios relativamente elevados han incitado a los productores a aplicar los respectivos tratamientos en tiempo y forma. A su vez, un comentario recurrente por parte de los responsables de los campos, ha sido el registro de precipitaciones menos abundantes que el año pasado pero mejor distribuidas. No obstante, en algunos lotes se hubiera podido alcanzar el máximo de potencial si hubiese llovido un tanto más, sobretodo en octubre.
En síntesis, el comentario de los compradores brasileños ha sido unánime: el estado de los cultivos visitados es óptimo, tanto desde el punto de vista cuantitativo como cualitativo.

La incertidumbre argentina deja perplejos a los molinos brasileños

 
                                                                    
 

En primer lugar, cabe destacar que al día de hoy las diferentes previsiones relativas a la producción argentina de trigo 2013/14 varían entre 8.5 y 11 M/tons. Resulta normal que el mercado disponga de datos heterogéneos, ya que las diversas fuentes que se dedican a prever la futura cosecha no coinciden necesariamente en cuanto al área sembrada y al rendimiento esperado.
Por el contrario, lo que no resulta normal es que la comitiva brasileña que tuvimos el gusto de agasajar, y que representa alrededor el 70% del segundo mercado mundial de trigo, no tenga la menor idea al día de hoy si su principal abastecedor histórico de trigo contará o no con un saldo exportable. De hecho, la pregunta recurrente que surgió constantemente por parte de los molinos brasileños, y por supuesto imposible de responder, fue la siguiente: ¿cuánto trigo va a exportar la Argentina, y cuándo?
Si analizamos brevemente algunos datos de la molinería brasileña comprenderemos rápidamente por qué razón los brasileños están tan preocupados:
Del 01/08/2013, comienzo de la campaña de comercialización de trigo en Brasil, al 31/10/2013 (los datos de noviembre aún no han sido publicados por el Ministério do Desenvolvimento, Indústria e Comércio Exterior), Brasil importó 1.85 M/tons., de las cuales 1.5 M/t fueron exportadas por los Estados Unidos, mientras que Uruguay, Canadá, Paraguay y Argentina exportaron respectivamente a Brasil, 0.18 M/t, 0.08 M/t, 0.07 M/t y 0.023 M/t.
Teniendo en cuenta que según los molinos brasileños el gigante sudamericano deberá importar en 2013/14 (del 01/08/13 al 31/07/14), 7 M/t de trigo, desde el 01/11/2013 aún quedan importar 5,.1 M/tons. Dado que Paraguay quedó fuera del mercado a causa de heladas (le están importando trigo a Brasil y Uruguay), y que Uruguay contará con un saldo exportable de 1 M/tons., Brasil deberá comprar 4.1 M/t ya sea a la Argentina o a orígenes fuera del Mercosur.
Cabe destacar que la molinería brasileña está en promedio cubierta hasta fines de febrero, luego deberá golpearle la puerta al mercado mundial. El dato, que no es menor, es que el impuesto aduanero de 10% aplicado sobre el precio FOB de orígenes exportadores que no forman parte del Mercosur, entró en vigor nuevamente el 01/12/13 pasado, tras 7 meses de retiro del impuesto debido a la ausencia de exportaciones argentinas.
La pregunta es la siguiente: ¿mantendrá Brasil este impuesto aduanero si la Argentina no le exporta trigo?
La respuesta por parte de ABITRIGO fue contundente: “al regresar a Brasil enviaremos una carta al Ministerio de Agricultura a fin de hacerle llegar nuestra inquietud respecto a la ausencia de posicionamiento por parte del gobierno argentino. Si la Argentina no abre sus exportaciones, las chances de que el TEC sea nuevamente suprimido son altísimas, teniendo en cuenta que al Ministerio de Agricultura no le tembló el pulso cuando suprimió el TEC en plena cosecha brasileña. Hace veinte años que esto no acontecía”.
Y el molinero brasileño situado en Rio Grande do Sul continúa: “si suprimimos el TEC, el FAS argentino pierde como mínimo 20 dólares”. A fin de evitar una hemorragia descendente de precios a nivel local, no cabe duda que la apertura de exportaciones resulta fundamental.
Con 8.5 M/tons. de producción, 6.5 M/t de consumo doméstico, y sin exportación, el mercado local es bajista. Y con 1.3 M/t sin apertura de exportación, el mercado local será fuertemente bajista.
Por último, cabe destacar una pregunta efectuada por un molino brasileño localizado en el sur de Brasil en un encuentro con un acopiador: ¿Cuánto sembrará de trigo la Argentina el año que viene y en los próximos años?
Todo comprador necesita previsibilidad y fiabilidad en la entrega. Dos elementos que en Argentina brillan por su ausencia.
No obstante y pese a todo, resulta llamativo que los brasileños sigan apostando al trigo argentino, luego de tantos años de default técnico-comercial. Pero no es difícil de entender: la relación precio/calidad/logística del trigo argentino sigue siendo la mejor para la industria brasileña. Y ello es estructural, más allá de toda coyuntura, que como el latín lo indica, deriva del griego coníungere, un prefijado sobre íungere, que significa “unir y enlazar, actuar en común y trabar”, incluso a veces “unir con los lazos del matrimonio”.
Y como todos sabemos, no siempre los matrimonios duran eternamente.


                       

Foto: Martín G. Alzaga