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El negocio cerealero sigue en vilo por rumores sobre cambios en la política exportadora para los biocombustibles, todos sin confirmación oficial pero manejados por altas fuentes del sector.

En la maraña de rumores, el que toma fuerza es el de que un ala del Gobierno estudia que YPF se convierta en el comprador único de biocombustibles, con la finalidad de volcarlo exclusivamente al mercado interno. También se habla de una suba de retenciones del 5% con aumento del 10% del corte interno obligatorio.

Ayer, durante el congreso de Aapresid, el secretario de Agricultura, Lorenzo Bassó, le dijo a referentes del sector que no tiene conocimiento sobre una medida similar, pero su aclaración no alcanzó a calmar a los empresarios, que perciben que las decisiones se toman en otras áreas de la Casa Rosada.

Ante tantas versiones que meten ruido en el negocio, el gerente general de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), Osvaldo Bertone, aprovechó su paso por el congreso de Aapresid para pedir “reglas claras” y previsibilidad jurídica. “Remarcó enfáticamente la necesidad de que el Estado mantenga reglas claras y a largo plazo para incentivar este tipo de inversiones que son -según manifestó- muy costosas y de recupero a muy largo plazo”, dijo al final de su ponencia.

Bertone de ACA se refirió a dos proyectos de inversión que la asociación tiene en marcha. Por un lado, una planta para generar biogás a partir de un criadero de cerdos. Se trata de un campo de 2400 has ubicado en la provincia de San Luis, que opera con una producción anual de 32 mil cabezas de 120 kilos cada una. Junto a ese predio están construyendo una planta generadora de energía eléctrica con una capacidad instalada de 2.0 Mkva. Funcionarán con dos biodigestores primarios de hormigón armado calefaccionados y agitados de 3400 m³ cada uno y otros dos secundarios troncocónicos, calefaccionados y agitados de 3700 m³ cada uno.

Según indicó Bertone, la generación de energía proyectada en esa planta alcanzaría una producción diaria de biogás de 12.000 m³ en la primera etapa. “El destino sería para uso propio del criadero y el resto para la venta al mercado mayorista”, explicó al tiempo que estimó que la planta comenzaría a funcionar en noviembre de este año.

Asimismo, mostró la marcha del proyecto de una planta para generar bioetanol que está diagramada para operar con un mix de maíz y sorgo de bajo tanino. En este caso el predio está diseñado en Villa María, Córdoba con una capacidad operativa de 145.000 m³ anuales. “Se trata del proyecto más federal que tenemos ya que está integrado por 63 cooperativas asociadas de ACA”, señaló.

 Según trascendió, ACA está haciendo gestiones ante el gobierno nacional para que le habiliten la importación de equipos para la planta de Córdoba que el gobierno le tiene trabado.

“Se necesitan reglas claras, estables y sostenibles en el tiempo. Políticas públicas a largo plazo. Si eso no existe, no es posible desarrollar este tipo de proyectos que son tan costosos”, completó el gerente general.

Fotos: Martin G. Alzaga