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Por Ezequiel Tambornini

Los administradores de las principales industrias argentinas elaboradoras de biodiesel se apuraron a declarar un volumen significativo de exportaciones del biocombustible ante la eventual posibilidad de que el titular de la Secretaría de Comercio Interior, Guillermo Moreno, intervenga ese mercado.

En julio de 2012 las exportaciones declaradas de biodiesel fueron de 325.500 toneladas. Se trata de una cifra 63% superior a la de junio pasado y la más elevada –por lejos– desde que la Argentina comenzó a exportar el biocombustibles .

En julio el precio de exportaciones de biodiesel argentino –elaborado en base a aceite de soja– registró un precio promedio ponderado de 1101 u$s/tonelada, mientras que en ese mismo mes el valor oficial del biocombustibles para comercializar en el marco de cupo interno (corte del 7% con gasoil) fue de 5195,7 $/tonelada (equivalente a 1154,6 u$s/tonelada con el tipo de cambio oficial).

Ambos valores se ubicaron por debajo del precio FOB oficial del aceite de soja crudo (que en julio fue en promedio de 1185 u$s/tonelada).

En julio de este año la mayor parte de los envíos se declararon con destino a Holanda (43,0%). Se trata de embarques que ingresan por el puerto de Rotterdam para luego ser redistribuidos a diferentes naciones europeas.

Otro 15,4% de las 325.500 toneladas declaradas se destinó a España, mientras que un 8,0% fue para Perú y un 7,7% a Italia (un 25,4% se registró sin identificar destino final).

El derecho de exportación efectivo vigente sobre el biodiesel es del 14% versus el 32% en el aceite de soja y el 35% en el poroto de soja.