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Las paritarias de este año comienzan al rojo vivo. En medio de las subas de precios en los supermercados, el "tarifazo" energético que arrancó este mes y la ola de despidos que se vive en el sector público y privado, el Gobierno insistió en ponerle un "techo" entre el 20% y el 25% a la discusión salarial y el líder de la CGT Azopardo, Hugo Moyano, no tardó en contestar. "Si quieren limitarnos, empezaremos a hablar en otro idioma".
 
Sin embargo, descartó convocar por el momento a un paro y habló de esperar "un tiempo prudencial" para evaluar las medidas del presidente Mauricio Macri.
 
"No podemos actuar irracionalmente, tenemos que dar el tiempo suficiente. Hay una evaluación con gremios que estamos viendo y observando todo lo que está pasando para cuando llegue el momento ponerlo sobre la mesa", afirmó este marte sen diálogo con Radio Mitre y La Red.
 
Y recordó: "Cuando empezamos a pelear contra Carlos Menem, no lo hicimos a los quince días o cuarenta días, lo hicimos después de un tiempo prudencial para hacer una evaluación seria de lo que estaba haciendo el gobierno. Muchos de los que nos critican ahora (por no convocar a un paro contra Macri) eran cómplices de las medidas que se tomaron en los '90".
 
Esta mañana, el ministro de Trabajo, Jorge Triaca, ratificó que habrá cambios en el Impuesto a las Ganancias en marzo y aseguró que serán retroactivos a enero.
 
Pero, además, reiteró que "el margen de discusión" para las paritarias estará entre el 20% y 25%, ya que esa esa la cifra de inflación que estima la Casa Rosada, un número bastante alejado al que estiman las consultoras privadas cercanas al oficialismo que hablan del 30%.
 
"Me hace acordar al INDEC del gobierno anterior, porque será mucho más alta", comentó Moyano el lunes y criticó solapadamente a Macri por haber recibido a los empresarios, pero no a los sindicatos. "No le caerán simpáticos los trabajadores", dijo.
 
El líder camionero reiteró que su gremio discutirá la suba salarial "sobre la base de la inflación".
La Unión Industrial, también adelantó este martes su postura en la discusión paritaria y advirtió que "no hay forma" de dar incrementos del 30%, como ya exigen algunos gremios.

"Si hay impacto en el poder adquisitivo (por los aumentos de precios), hay que recomponerlo, pero eso será en la medida de las posibilidades de cada sector", manifestó Daniel Funes de Rioja, vicepresidente de la UIA, en Radio El Mundo
En consonancia con lo que dice el Gobierno, aseguró que "un 30% está muy lejos de lo que debería ser la inflación en 2016" y explicó que "el sector privado necesita estabilidad macroeconómica y eso sólo se obtiene con inflación decreciente".

La idea del equipo económico del macrismo es que los aumentos salariales no generen una nueva disparada de la inflación.
"Los índices de inflación de estos años provocaron un achatamiento de la actividad, una recesión de cuatro años en la industria. Todo hay que remontarlo entre todos y eso implica hacer un esfuerzo entre trabajadores y empresarios, buscar soluciones complementarias", dijo Funes de Rioja.
Al respecto agregó que "se debe tener en cuenta que hay problemas de productividad y de ausentismo serios", así que "eso también va a tener que estar en la mesa de discusión".

El vicepresidente de la UIA trató de bajar un tono a la discusión , al señalar que "esto aún no comenzó, es más bien una discusión o posicionamiento mediático" porque en realidad "en el sector privado, las paritarias mas fuertes son entre marzo y junio".
Finalmente agregó que toda la discusión estará condicionada por la marcha de la economía en los próximos meses. En ese sentido, no descartó que los aumentos de la luz y el gas se trasladen a los precios: "Estamos haciendo análisis del impacto que tendrán en la actividad, luego veremos".