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Por Merino Soto.- Sin embargo, el campo deberá esperar a ver qué pasa con el déficit fiscal. Si el rojo es muy grande, algunas de las posibles señales que desea el campo pasaran a un freezer o al menos se darán a cuenta gotas.
 
La situación de las producciones provinciales es uno de los temas principales en la agenda.
 
En ese sentido, este diario pudo saber que se armó un plan a partir del relevamiento que se hizo directamente en cada provincia, pero también hubo encuentros con cada sector de insumos referidas a las economías regionales para poder elevar una propuesta seria. El gobernador adelantó a los productores de la Federación Agraria Argentina (FAA) en que se repensará el esquema actual de retenciones y apuntó en “cambiar lo que haya que cambiar”.
 
Hablo de aplicar “instrumentos fiscales progresivos y de segmentación” y dejó en claro que una devaluación “es pan para hoy y hambre para mañana”.
 
Más dejo en claro que el Estado será un actor presente y descreyó en delegar en el mercado el espacio en donde se den las oportunidades y se garantice la competitividad del sector agropecuario.