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Por Ismael Bermúdez

Los fuertes pagos por intereses y vencimientos de la deuda pública que el Gobierno tiene que enfrentar este año explican la decisión oficial de aplicar un cepo casi total a la compra de dólares por parte del público y a las empresas y restringir las importaciones. El Gobierno necesita juntar todos los dólares que ingresan del superávit comercial para cumplir con los acreedores y por eso no deja que nadie o casi nadie puedan comprar divisas en el mercado oficial.

Según las proyecciones oficiales, con un rígido freno a las importaciones, este año el excedente del comercio exterior rondaría 11.000 millones de dólares.

Pero los pagos de intereses en moneda extranjera de la deuda pública se llevarían US$ 7.000 millones, en especial el pago del cupón PBI de fin de año. Y los vencimientos de capital otros US$ 5.000 millones, siempre y cuando los organismos financieros, como el BID y el Banco Mundial refinancien la totalidad de los desembolsos que hay que hacer este año, y lo mismo hagan el Banco Central, el Banco Nación y la ANSeS.

Solamente el pago del Boden 2012 en agosto se lleva 2.500 millones de dólares y el cupón PBI en diciembre otros 3.500 millones de dólares.

Las cuentas no terminan aquí porque el sector privado también necesita dólares para hacer frente a sus compromisos financieros, pero solamente podrán acceder a las divisas a cuenta gotas y si ingresan por otra vía, como inversiones o nuevos préstamos financieros, a lo que son reacios por las trabas en el mercado de cambio.

Aun así, y a pesar de que el Banco Central es el único comprador de dólares, se espera que este año las reservas internacionales vuelvan a caer . A fines de 2010 sumaban US$ 52.000 millones, en 2011 cerraron en torno de US$ 46.500 y se calcula que a fin de este año se ubicarían por debajo de 45.000 millones de dólares.

Las cifras del primer trimestre del Banco Central señalan que “los pagos netos de servicios de capital e intereses de la deuda en moneda extranjera del sector publico y BCRA fueron de 1.450 millones de dólares”, porque al mismo tiempo ingresaron US$ 600 millones por colocaciones de deuda de gobiernos provinciales y ventas de dólares de organismos oficiales. En tanto “el sector privado debió atender vencimientos de intereses por US$ 314 millones”.

Al mismo tiempo, si bien se frenaron importaciones, ahora se están pagando compras de gasoil del año pasado . Entre enero y marzo de este año esos pagos sumaron US$ 2.213 millones, el doble que igual periodo de 2011, a pesar que las compras del exterior se redujeron un 2%. Esto se explica “por las cancelaciones de deuda por importaciones de gasoil realizadas en periodos anteriores”, dice el informe del BCRA.

De acuerdo a los últimos datos oficiales (septiembre de 2011), la deuda pública supera 175.000 millones de dólares , cuando luego del canje de 2005 rondaba 125.000 millones de dólares.

Y se estima que la deuda siguió creciendo en todos estos meses pese a la promocionada política de “desendeudamiento” de la Casa Rosada, con más de la mitad adeudados al Banco Central y a la ANSeS y una parte que continúa “en default” como sucede con el Club de París.