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Los precios del trigo en el disponible no logran recuperarse a pesar de que la oferta en la principal zona cerealera argentina (sudeste, sur y sudoeste bonaerense) probablemente será inferior a la inicialmente proyectada por el impacto de la restricción hídrica ocurrida en la última fase del cultivo.
 
La principal razón detrás de ese fenómeno es el hecho de que los exportadores no tienen ningún apuro por originar mercadería porque están súper sobrecomprados en trigo.
 
A la fecha apenas se oficializaron ante la Ucesci Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE 180) de trigo 2016/17 por 2,08 millones de toneladas (de las cuales 620.000 corresponden a Cofco, 400.000 a Bunge y 265.000 a Cargill), cuando los traders llevaban compradas al 14 de diciembre (últimos datos oficiales publicados) 4,17 millones de toneladas.
 
Para colmo, la mayor parte de los productores de la zona norte de la región pampeana –donde ya se levantó casi toda la cosecha– están reventando el trigo para hacer caja de fin de año.
 
Además, los molinos del norte bonaerenses que compran partidas con alta calidad panadera, si bien durante el inicio de la cosecha salieron a competir fuerte para originar mercadería, en los últimos días vienen aflojando (las partidas premium se están negociando en valores que no logran superar los 2700 $/tonelada).
 
Lo que está ocurriendo en el mercado está bastante lejos de ser una sorpresa: a comienzos de mayo pasado el analista de mercados de granos Enrique Erize recomendó tomar coberturas de trigo 2016/17 en caso de tener que vender parte del cereal en cosecha.
 
Por entonces el precio del contrato Trigo Buenos Aires Enero 2017 del Matba cotizaba en torno a los 170 u$s/tonelada. En junio comenzó a caer para perforar los 160 u$s/tonelada a comienzos de julio. Siguió cayendo luego para ubicarse por debajo de los 150 u$s/tonelada en los inicios de septiembre. Hoy martes ese contrato finalizó con un precio de cierre de 145,5 u$s/tonelada.