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“El panorama es muy alentador. Hace 30 días que no llueve” Así sintetizó Jorge Sansot, asesor privado y miembro CREA de General Villegas, la situación en esa ciudad, una de las afectadas por las inundaciones que se dieron apenas un mes y medio atrás.  “Por lo que pintaba que iba a ser, nos perdonó”, destacó.
  
En aquella zona, donde predomina la soja, informó que se está sembrando la oleaginosa pero se retrasó un mes de la fecha óptima.
 
“Esto perjudicará de lleno al rinde. Se pierden 30 kilos por día a medida que la siembra se aleja de la fecha óptima. O sea, que seguramente hay 900 kilos de potencialidad de rinde que ya quedaron en el camino”, apuntó. Y agregó que el maíz tardío se está sembrando en la fecha correspondiente.
   
En lo que respecta a las pérdidas, Sansot resaltó que .muchos lotes de maíz de primera se han inundado y los que se ha ido el agua, van a rendir muy por debajo del promedio histórico.
 
“Como el trigo se hace en campo buenos, no hubo tanta pérdida de área. Se están cosechando esta semana y en algunos lados rinden entre 5.500 kilos a 6.000 kilos por hectárea. Y en lotes donde se juntó agua, hay rindes de 2.500 kilos por hectárea.
 
La ganadería fue otra actividad afectada. “Las pasturas perdidas hay que resembrarlas el año que viene. Se gastó más en maíz y suplementos. Además, se tuvo que vender la hacienda apurado”, describió.
 
Mirando al futuro, Sansot destacó que el productor está optimista a pesar de esta situación adversa.
 
Otro caso es el de Carlos Tejedor, localidad cercana a General Villegas y que también había sufrido las fuertes lluvias, “En 20 días cambio de un extremo a otro. Dejó de llover, se secaron lotes, hubo con mucho viento, y ahora esta re seco”, destacó Luis Urdangarín, productor de aquella zona bonaerense.
 
En este sentido, sostuvo que son dos situaciones que parecen increíbles. “Estos suelos tienen la tosca cerca. La napa está a 1,5 metros. Y hace un mes y medio se encontraba a 20 centímetros”.
 
Con este panorama, indicó que le restan sembrar 40 hectáreas de soja y 80 hectáreas de maíz. “No se si las podré sembrar. Dan para este fin de semana lluvias para esta zona pero solo de 15 milímetros”.
Por otro lado, Lisandro Santos,  presidente de la Sociedad Rural de Florentino Ameghino, destacó que hubo dos problemas principales: el retraso en la fecha de siembra y los costos adicionales en el control de las malezas.
  
"La cosecha de trigo no fue lo esperado. Los rindes no fueron altos y la calidad fue baja. El único mercado que queda es el de exportación", indicó.
Y coincidiendo con el productor Urdangarín, el directivo de la Rural de Ameghino sostuvo que ahora hace falta agua. 
  
Las paradojas de producir en una fábrica a cielo abierto.