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Advanta y Bioeléctrica firmaron un acuerdo para testear la capacidad del sorgo para producir metano como materia prima para el funcionamiento del generador de energía eléctrica.
 
Con el objetivo de testear la capacidad de generar metano de los materiales genéticos de sus sorgos, Advanta firmó un acuerdo con Bioeléctrica, una compañía del grupo Bio4 situada en Rio Cuarto, la primera empresa argentina en generar energía a partir del maíz  y sorgo.
 
El metano es un gas liberado como producto de la fermentación anaeróbica de la biomasa de cultivos de sorgo o maíz dentro de un biodigestor. El mismo es utilizado como materia prima fundamental para la generación de energía eléctrica.
 
La planta de Bioeléctria consume el equivalente a 600 hectáreas de cultivo para abastecer la necesidad de todo el año. En su planta de Rio Cuarto, también se utilizan los desechos orgánicos de los tambos de la zona como fuente de microorganismos que transforman la celulosa de maíz o sorgo en gas metano. Otro de los productos que se obtiene del proceso de generación de biogás son los biofertilizantes  de alta calidad  y fácilmente aprovechables que devuelven al suelo parte de los nutrientes utilizados para originar materia orgánica.
 
De esta manera se transforma la energía lumínica del sol en energía química (biomasa) a través de las plantas de maíz o sorgo y esta biomasa luego es trasformada en energía eléctrica + energía calórica (utilizada para calentar agua como parte del proceso).
 
Los equipos de Marketing y del área Comercial de Advanta Semillas junto al Ing. Pedro Pardo, breeder de sorgo, se hicieron presentes en la planta con el objetivo de revisar los lotes donde se serán sembrados los híbridos de sorgo.
 
Actualmente hay 5 plantas de este tipo en Argentina pero German Di Bella, presidente de Bioeléctrica, contó que proyectan llegar a las 45 plantas a nivel país acompañados por el gobierno nacional.
 
“Esta es una planta escuela que por ser la primera, hubo ajustes que elevaron el costo a  más 4,5 millones de dólares, pero el estimado que hoy manejamos no supera los 4,5  millones de dólares.
En Alemania hay 9.800 plantas como esta. En Córdoba, con cincuenta, generaríamos el 3 por ciento de lo que se consume en la provincia y el productor podría pasar a tener otro rol, a producir servicio”, explicó Di Bella. Y destacó: “La experiencia de Bio 4 fue muy positiva para comprobar los beneficios de las asociaciones entre productores; al asociarse uno se anima a tomar más deuda, riesgo. Si realmente queremos integrarnos verticalmente, tenemos que pensar en unirnos”.
 
Por su parte, Tomas Sundblad, gerente de Marketing y Desarrollo de Advanta Semillas, señaló que la empresa tiene “grandes expectativas con este desarrollo conjunto para la evaluación de los híbridos de sorgo ya que serán una fuente importante de biomasa para la generación de bioenergía abriendo así una nueva puerta en la agroindustria, agregando valor en los procesos productivos regionales”.