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El gobierno argentino busca obtener divisas de mercados claves como China, Brasil, Estados Unidos y Rusia, a través de la consolidación de exportaciones de soja, trigo, carne vacuna, vinos y productos de economías regionales tales como limones, peras y manzanas, indicaron hoy los agregados agrícolas destinados a esos países.
 
El agregado agrícola argentino en Brasilia, Javier Defourquet, estimó que el mercado de panificación de Brasil estaría en condiciones durante el 2017 de comprar en Argentina hasta 5,3 millones de toneladas de trigo, apoyado en un cereal con un piso de calidad de 9,5 de proteínas.
 
Sin embargo, Defourquet explicó a DyN que atento a las condiciones que ofrece el mercado brasileño este estaría en condiciones de adquirir no menos de 4 a 4,5 millones de toneladas de trigo argentino durante el próximo año y allí deben jugar en mucha menor medida el aporte de Uruguay y Paraguay.
 
Sin perder de vista las oportunidades de cerrar ventas vinculadas a la tecnología en Europa y mantener un buen volumen de venta de soja a granel con destino a China, el gobierno de Mauricio Macri se apresta a abrir una nueva delegación agrícola en Moscú con el objeto de estimular los contactos comerciales con Rusia.
 
En el caso de Estados Unidos, José Molina, agregado agrícola argentino en la embajada de Washington, dijo que la participación argentina en el volumen de compras que realiza Estados Unidos es del 1 por ciento sobre un volumen total de 150.000 millones de dólares, siendo Argentina el proveedor número 22.
 
Molina aguarda una pronta resolución administrativa por parte del Departamento de Agricultura estadounidense para habilitar el nuevo ingreso de limones argentinos por un monto anual de 20 millones de dólares, hecho que podría suceder antes del traspaso de mando de Barack Obama a Donald Trump.
 
Tras participar de una jornada de Perspectivas Agrícolas organizado por el Ministerio de Agroindustria en la Bolsa de Cereales porteña, el funcionario argentino en Washington consignó el trámite para autorizar un cupo de 20.000 toneladas de carne fresca vacuna sin hueso podría demorar más, ya que recién durante noviembre-diciembre varias plantas frigoríficas locales serán auditadas por técnicos de la USDA.
 
Si bien se espera que esta evaluación realizada sobre la estructura de producción cárnica local no arroje sorpresas, desde el gobierno argentino se entiende que el cupo solicitado no contaría con una resistencia por parte de una futura administración Trump.
 
El cupo tramitado por Argentina de 20.000 toneladas contaría con el pago de 44 dólares por tonelada para posibilitar su ingreso a Estados Unidos y superando este monto los exportadores locales deberían abonar un arancel del 26,4 por ciento.
 
Más allá de esto no se desconoce la oportunidad de generar divisas a través de la exportación de vino argentino por 400 millones de dólares anuales y las ventas de Biodiesel local por 680 millones de dólares durante enero-agosto de 2016, junto a otros productos comercializados como azúcar y frutas.
 
Para el caso de las peras y manzanas con destino a Brasil, las autoridades argentinas prevén que para el 2017 se consolide un incremento interanual en las ventas de estas frutas, teniendo en cuenta que este año se cerraron ventas por sólo 100 millones de dólares.
 
Allí, las trabas fitosanitarias impuestas por Brasil redujeron los envíos de peras en un 7 por ciento y en un 30 por ciento para las manzanas, hecho que según Defourquet durante el 2017 se podría volver al nicho histórico de ventas de frutas que adquiría el vecino país tras salvar la situación sanitaria.