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Por Mariano Galíndez (Punto biz).- Dentro de los nueve puntos que presentaron, los más fuertes fueron la queja por la extensión unilateral de 5 a 30 días de las liquidaciones finales de las facturas y el pedido que sea obligatorio el análisis de calidad del trigo en las Cámaras Arbitrales porque aseguran que son repetidos los casos en que los molinos pagan por el grano recibido en base a los análisis que ellos hacen en sus plantas cuyos resultados no siempre coinciden con los realizados por los vendedores.
 
La respuesta de la Federación de Industriales Molineros fue el compromiso de trasladar la inquietud a los asociados avisando que había molinos que aceptaban la instancia de llevar a Cámara las muestras en las que no había opinión unánime sobre la calidad mientras que otros se oponían. Por el lado de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Granos se respondió que analizarán internamente los planteos para dar una respuesta apropiada. Es por eso que las partes acordaron en volver a encontrarse el 3 de octubre para escuchar las respuestas del sector comprador.
 
Otro de los puntos destacados de la reunión de ayer fue el relato de entregadores de granos sobre las dificultades que tienen en algunos puertos para poder cumplir con su trabajo, ya que sostienen que hay terminales en las que directamente están a 100 metros de la zona de calada. Sobre ese punto, desde la industria aceitera se explicó que por los grandes volúmenes que hoy se manejan en la descarga el ritmo de trabajo es tanto que hoy cambió usos que había en el pasado.
 
Los acopiadores también relataron problemas en la descarga por las asignaciones de cupos en puertos y plantas, pero allí quedaron medio en off side porque las respuestas dejaron en evidencia que muchas veces los congestionamientos se debían a los camiones sin cupos que los mismos productores, acopios y cooperativas mandan a puerto. También se responsabilizó a los camioneros.
 
Todos los asistentes consultados por punto biz resaltaron que el clima de la reunión fue totalmente cordial. Y si bien quedó claro que hay temas que competen más a unas regiones que a otras (la extensión del pago de finales de liquidaciones es más gravosa en molinos que en aceiteras), no hubo fisuras en las presentaciones que hicieron Raúl Dente (Federación Nacional de Acopiadores) y Guillermo Llovera (Sociedad Gremial de Acopiadores de Rosario).