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Las exportaciones de  biodiésel de Argentina, uno de los mayores proveedores  internacionales del biocombustible, escalaron 187,2 por ciento  en el segundo trimestre del año, frente al mismo período de  2015, de la mano de un incremento en la producción.                
 
Según datos del Indec publicados hoy, entre abril y  junio el país envió al exterior 404.215 toneladas  de biodiésel, que es elaborado en base a aceite de soja, un  subproducto del que la Argentina es el exportador mundial líder.                 
 
El despegue de los embarques en el segundo trimestre se dio  gracias a un aumento del 56,6 por ciento interanual en la  producción del biocombustible, que alcanzó 704.717 toneladas,  según difundió el ente estatal de estadísticas Indec.   
 
En los primeros seis meses del año, la producción acumulada  de biodiésel sumó 1,1 millones de toneladas, lo que representa  una expansión interanual del 41,6 por ciento.                
 
En marzo, la Organización Mundial de Comercio (OMC) falló a  favor de varios reclamos de Argentina contra los aranceles  antidúmping que la Unión Europea (UE) aplica desde hace años a  las importaciones del biocombustible proveniente del país  austral. La decisión fue luego apelada por la UE.                
 
Al mismo tiempo, los despachos al mercado interno subieron apenas 1,6%, la contracara del impacto de las políticas que aplicó para el sector el gobierno de Mauricio Macri.  Como explicaron a El Cronista desde RIA Consultores,  “hay un mercado interno donde el precio de la materia prima se actualizó por la quita de retenciones y por la devaluación de la moneda, y el precio de biodiésel no se actualizó”.