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Unos 3.000 productores agrícolas de Mendoza, afectados por las intensas lluvias registradas esta temporada, podrán acceder por primera vez a los beneficios que prevé la emergencia agropecuaria, sistema que en la provincia cuyana sólo contemplaba las pérdidas por heladas y granizo.
 
Los contundentes datos sobre la incidencia del fenómeno del niño en los cultivos de la provincia provistos por la dirección de Agricultura y Contingencias Climáticas (DACC ) llevaron a que el Poder Ejecutivo local sumara, por decreto, la compensación de daños por efectos de la lluvia al sistema de emergencia agropecuaria.
 
Por ello, los productores agrícolas que hayan sufrido pérdidas en su cosecha a causa de las intensas precipitaciones ocurridas en el periodo 2015-2016, podrán solicitar la certificación proporcional del daño, respecto a la producción total del ciclo que se hubiera logrado de no acontecer este fenómeno climático, detallaron.
 
Para realizar las presentaciones, los damnificados tendrán 20 días hábiles tras la publicación en el Boletín Oficial del decreto 544/16, que reglamenta esta novedosa medida.
 
Luego los técnicos de la DACC evaluarán la condición de emergencia o desastre, según la incidencia de las pérdidas si son del 50% o del 80%, respectivamente. A su vez- se informó- la entidad será la encargada de determinar las zonas o distritos donde las precipitaciones hayan sido recurrentes y significativamente superiores a los registros históricos.