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El ex presidente del Banco Central y economista, Javier González Fraga, aclaró la intención de su polémica frase sobre el consumo de la clase media y aceptó que su declaración "no fue feliz".
 
La semana pasada, el asesor del massismo criticó la política económica kirchnerista y, en el medio, lanzó una desafortunada declaración que se hizo eco en los medios: "Le hicieron creer al empleado medio que podía comprarse plasmas y viajar al exterior".
 
Tras las repercusiones, el economista dijo en el programa Intratables que nunca tuvo la intención de "hacer sentir mal a nadie" y pidió disculpas, a la vez que explicó el verdadero sentido de sus palabras: "Acepto que mi frase no fue feliz. A lo mejor me expresé mal, lo que yo pienso no es eso. Hubo mucha hipocresía y falsedad en los comentarios que se hicieron".
 
"Lo que quise decir es que la manera de crecer es generar un proceso de inversión, no de consumo. Aplaudo el consumo cuando es el resultado de la generación de empleo, no de la emisión monetaria. Las condiciones que le permitieron (a la gente) una gran capacidad de consumo eran condiciones poco sustentables", añadió.
 
Y continuó: "No era mi intención hacer sentir mal a nadie. No estoy en contra de la movilidad social ascendente. Me considero un economista progresista, y estoy en contra de la burbuja cambiaria que se repite cada diez años y hace que nadie quiera invertir en el país".
 
El economista reiteró que este es un tema en el cual trabaja hace mucho tiempo, y que incluso ha escrito un libro al respecto.
 
Y concluyó: "Una cosa es generar riqueza y otra es generar dinero. La riqueza es la producción, no la emisión monetaria. Lo importante es estimular la inversión y no el consumo; este último es la consecuencia de la inversión".