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Por Dante Rofi.- Ni el avance de la cosecha, ni las bajas externas lograron ayer morigerar la firmeza de los precios de la soja en el mercado doméstico, donde fábricas y exportadores se disputan la mercadería para abastecer las plantas procesadoras del Gran Rosario y para completar los barcos que deben salir en los próximos días desde las terminales ubicadas sobre el Paraná.
 
Por tonelada disponible de soja las fábricas volvieron a pagar $ 3600 para Timbúes, San Martín, Ricardone, San Lorenzo, Villa Gobernador Gálvez y para General Lagos, mientras que la exportación elevó la propuesta a $ 3650 e incluso convalidó hasta $ 3700 en negocios puntuales por lotes importantes.
 
Para los puertos del Sur de Buenos Aires la demanda ofreció $ 3600 por tonelada de soja para Bahía Blanca, sin cambios, y $ 3550 para Necochea, $ 50 menos que el viernes.
 
A excepción de Necochea, el resto de los valores ofertados por los compradores de soja quedaron por encima del FAS teórico, que fue calculado por el Ministerio de Agroindustria en 3589 pesos por tonelada.
 
Como se señaló anteriormente, la necesidad de mercadería de la demanda es la responsable de la firmeza. Y en ese sentido, según el reporte de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) sobre el programa de carga de buques para todos los puertos argentinos, entre el 5 del actual y el 6 del mes próximo se deben despachar 2.427.870 toneladas de poroto de soja; 1.794.621 toneladas de harina, y 515.732 toneladas de aceite.
 
Por segunda jornada consecutiva, el balance de los negocios fue positivo para los precios de la soja en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), donde los contratos mayo y julio de la oleaginosa sumaron US$ 3,40 y 2,80 al terminar la rueda con ajustes de 264,40 y de 265,90 dólares por tonelada.
 
En cambio, en la Bolsa de Chicago, tras las subas acumuladas durante la semana pasada los precios de la soja cerraron en baja ayer. En efecto, las posiciones mayo y julio perdieron US$ 2,76 y 3,03, mientras que sus ajustes resultaron de 374,33 y de 377,18 dólares por tonelada.
 
Entre los factores que alentaron las bajas externas se destacaron una toma de ganancias de los fondos de inversión, como forma de posicionarse ante el informe mensual de oferta y demanda que hoy publicará el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos con las primeras cifras de la campaña 2016/2017 (como se amplía por separado) y el avance de la siembra de soja en el Medio Oeste estadounidense que, según el propio organismo, progresó sobre el 23% de la superficie prevista, frente al 16% promedio de los últimos cuatro ciclos agrícolas.
 
Además, durante la rueda llegó hasta los operadores la noticia de que China podría iniciar un plan para reducir sus existencias de soja con ventas en su mercado doméstico por hasta 100.000 toneladas semanales, hasta superar los 3,8 millones de toneladas. Una fuente del sector comercial señaló que si bien el impacto inicial de la noticia alentó el "espíritu bajista" de la rueda, en una lectura más analítica de la misma no debería modificar el escenario de importaciones chinas. "Esto es más bien una forma de renovar existencias y evitar pérdidas de calidad -ya las han padecido por almacenajes prolongados-, que un cambio en la política de compras de China", señaló.
 
Respecto del maíz, la BCR indicó que durante la jornada la exportación se mostró "más retraída" que en la rueda anterior y ofreció $ 2700 por tonelada, $ 100 menos que entonces. No obstante, un operador advirtió a LA NACION que en operaciones muy puntuales, exportadores que deben cubrir compromisos de embarque inmediatos convalidaron hasta 3000 pesos por tonelada de maíz con entrega a las 24 horas.
 
Las urgencias también se evidenciaron en el puerto de Bahía Blanca, donde los exportadores ofrecieron hasta $ 2500 por tonelada de maíz, contra los US$ 160 vigentes el viernes pasado, equivalentes a 2260 pesos.
 
En el Matba, las posiciones julio y septiembre del maíz sumaron un dólar y cerraron con ajustes de 161 y de 162 dólares por tonelada.
 
Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer bajas de US$ 3,24 sobre los contratos mayo y julio del maíz, cuyos ajustes resultaron de 144,78 y de 145,27 dólares por tonelada. El avance de la siembra del cereal en los Estados Unidos fue el principal fundamento bajista para los precios. Al respecto, tras el cierre de los negocios el USDA relevó el progreso de la siembra sobre el 64% del área prevista, por encima del 50% promedio de las últimas cuatro campañas.
 
Acerca del trigo, los exportadores ofrecieron ayer $ 2350 por tonelada condición cámara para Bahía Blanca y $ 2300 para Rosario, sin cambios. En Necochea el cereal se cotizó a $ 2250, con una suba de $ 20. El cereal con ph 78 y un mínimo de 10,5% de proteína osciló de 170 a 190 dólares. En cuanto a los molinos, pagaron entre 2100 y 3730 pesos.
 
 
Nueva mejora del estado del trigo en EE.UU.
 
Las buenas condiciones climáticas que acompañan la evolución de las variedades de trigo de invierno (aportan casi el 70% del total de la producción del cereal del país) en las Planicies trigueras de Estados Unidos volvieron a reflejarse ayer en el informe semanal sobre el estado de los cultivos publicado por el USDA.
 
En efecto, el organismo ponderó el 62% de los cultivos en estado bueno/excelente, por encima del 61% de la semana pasada y del 44% vigente un año atrás. El dato nacional también se replica en el principal Estado productores del cereal: Kansas. Allí hay un 54% de cultivos en estado bueno/excelente, por encima del 52% de la semana pasada y del 27% de 2015 para la misma fecha.