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Cada año, entre abril y mayo, el Banco Central (BCRA) suele revisar sus números del ejercicio que cerró en diciembre para luego publicar su balance definitivo. Este año, confiaron a LA NACION fuentes de la entidad, el BCRA presentará su balance 2015 con ganancias en torno de los $ 148.000 millones. Pero el directorio del banco ya estudia modificar los criterios contables con los cuales saca sus números de cara a 2016.
 
Ocurre que los $ 148.000 millones que ganó el BCRA son en gran medida producto del salto del tipo de cambio que se registró en diciembre del año pasado, cuando el dólar pasó de 9,80 a casi 14 pesos. En otras palabras, como los activos del Central -las reservas internacionales- son en dólares, al medirlas en pesos pasaron a valer más. Sin embargo, en términos operativos, cuando se contabiliza la renta que el BCRA obtuvo de sus reservas y se le resta lo que tuvo que pagar de gastos administrativos más el costo de sus títulos, las Lebac, la entidad en realidad estaría registrando pérdidas.
 
"El resultado acumulado esconde una perdida operativa de más de 15.000 millones de pesos", dice Pedro Rabasa, director de la consultora Empiria. "Porque el resultado por tipo de cambio supera los 160.000 millones de pesos. En otras palabras, si no fuera por el movimiento del tipo de cambio el BCRA hubiera perdido plata", sentencia.
 
Entre los economistas existe un gran debate respecto de estas ganancias contables, ya que el BCRA luego puede transferírselas a su principal accionista, el Tesoro. Lo que en la práctica implica emitir nuevos pesos. En el directorio del Central actualmente se está dando el debate.
 
"A futuro deberíamos cambiar la manera de contabilizar las ganancias", dijo a LA NACION una alta fuente del BCRA, con la condición no ser identificada. De otra forma, se da un círculo vicioso: "Devaluás, suben las reservas en pesos, suben las ganancias del Central, hay más transferencias al Tesoro, más emisión, más devaluación, más ganancias?", ilustró. Consultados al respecto, no obstante, voceros de la entidad dijeron no tener información.
 
A comienzos de los 2000, el actual ministro Alfonso Prat-Gay -entonces al frente del BCRA- y el entonces titular de Economía, Roberto Lavagna, habían firmado un compromiso por el cual este tipo de utilidades devengadas no serían distribuidas. Más allá de su impacto inflacionario (tal vez, lo más relevante en este momento) se supone que en teoría que así como un año el BCRA gana por una devaluación, al año siguiente puede perder si hay una apreciación del tipo de cambio. Pero la carta firmada quedó en los últimos años en el olvido. Y las ganancias del BCRA sirvieron en gran medida para financiar el déficit fiscal, lo que sólo alimentó más la dinámica inflacionaria.
 
"El de las ganancias es un tema que deberían consensuar tanto Economía con el BCRA. Sería sano que las ganancias por tipo de cambio nominal no se pasen al Tesoro. En épocas de inflación, sobre todo", dice Rabasa.
 
No se trata de un problema de fácil resolución. Si hoy se modificaran los criterios contables del Central, la autoridad monetaria debería blanquear que tiene un patrimonio negativo. "Aplicar el criterio contable internacional o incluso nacional implicaría reconocer un patrimonio negativo y no hacerlo implica convalidar lo anterior; estás entre dos males", subrayó otra fuente.
 
Por un conflicto, no habrá bancos por cuatro días
 
Los trabajadores bancarios volverán a realizar un paro a partir de hoy, esta vez por 48 horas, en reclamo de un aumento salarial "satisfactorio" en el marco de las paritarias y la reincorporación de despedidos en distintas entidades del sector. Por lo tanto, no habrá bancos por los próximos cuatros días.
 
El secretario general del gremio La Bancaria, Sergio Palazzo, ratificó la medida y justificó: "Es nuestra firme decisión en tanto no exista una respuesta positiva a nuestro reclamo de reincorporación de los despedidos y una propuesta satisfactoria de acuerdo salarial".