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La soja cerró ayer en u$s 332,35 la tonelada. Si bien repuntó en las últimas semanas, el valor es un 7% menor que hace un año atrás, cuando cerró en u$s 356 la tonelada. Además, en estos últimos 12 meses la oleaginosa llegó a alcanzar los u$s 388 la tonelada, precio que luce difícil de lograr según las perspectivas de los analistas de mercado de granos.
 
Un informe del IERAL, instituto de investigaciones económicas de la Fundación Mediterránea, prevé un escenario en el que la soja estará, en promedio durante 2016, en u$s 340 la tonelada. Para 2015, en cambio, calculó que el precio fue de u$s 367 la tonelada. Lejos quedó así el valor medio de 2012, cuando llegó a u$s 500 la tonelada. De hecho ese año se alcanzó el máximo de u$s 650 la tonelada, el 4 de septiembre de 2012.
 
Otro producto clave, la harina de soja, el IERAL proyecta con precio a la baja, un ajuste de casi el 17%. Los dos productos restantes del complejo sojero (aceite y biodiesel) se suponen con precios prácticamente estabilizados en sus valores 2015. "Los cereales más relevantes, caso del trigo, el maíz y la cebada, se ubican en un nivel de precios entre el 15% y el 24% más bajos que en 2015. El girasol y sus derivados también se suponen con valores a la baja (entre el 12% y un 20%). El maní y el aceite de maní, donde la falta de información hace más difícil la proyección, se ajusta un 10% y un 5%, respectivamente, en función de los precios observados en lo que va del año y del aumento del nivel de stocks que se proyecta a nivel internacional en el mercado del maní, proyecta el estudio elaborado por Juan Manuel Garzón.
 
Para la campaña actual se estima que se cosecharán 60 millones de toneladas de soja. Lo prevé tanto la Bolsa de Cereales porteña como el Ministerio de Agroindustria. Esta proyección es muy cercana a los 61 millones de toneladas que se cosecharon el año pasado. Además, en los primeros meses del año se exportaron granos que estaban retenidos a fines del año pasado a la espera de definiciones políticas, una vez pasadas las elecciones presidenciales. Aún así, el incremento en las cantidades vendidas no llega a ser compensada por la baja de los precios internacionales de los principales productos agrícolas: la ecuación termina arrojando que en dólares el monto será menor.
 
Entre los factores que explican la baja de los precios de los commodities está el incremento de la producción de Estados Unidos y Brasil (en soja), lo que lleva a una abundante oferta de productos agrícolas a nivel mundial. Además impactan también la economía China, que crece pero a marcha bastante más lenta; el fortalecimiento del dólar; y la caída de ingresos en países petroleros.
 
Hasta el momento, se lleva cosechado el 14% de los 20 millones de hectáreas sembradas. Se espera que el dato semanal que se conozca a partir del lunes de la liquidación de divisas de las agroexportaciones de granos y derivados sea en torno a u$s 400, o un poco menos, estima el IERAL, debido a los precios de la soja de en torno de los u$s 332 la tonelada que cerró ayer. "Puede deducirse que en las próximas semanas lo más probable es que la liquidación se ubique cerca o por debajo de la de 2015 y de períodos anteriores", señala el IERAL.
 
Según los datos de CIARA-CEC al lunes pasado, en lo que va del año se acumularon ingresos de divisas de las agroexportaciones por u$s 5.901 millones, cifra que es un 95% superior al mismo período del año pasado, debido al incremento de ventas en los primeros meses de 2016 que se retuvieron sobre el final de 2015 por la incertidumbre en la etapa electoral.