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Por Dante Rofi 
Los precios de la soja volvieron a caer con fuerza ayer en la Bolsa de Chicago y completaron así la sexta rueda consecutiva con saldo negativo. Este nuevo cierre bajista, que ya puso el nivel de las cotizaciones de la oleaginosa en el nivel más bajo desde fines de junio pasado, marcó un derrumbe cercano al 21% desde el 4 de septiembre, día en que la soja alcanzó su valor histórico más alto, de 650,74 dólares por tonelada.
El cierre adverso, que también comprendió a los cereales, se reflejó en el mercado local, donde no sólo bajaron los precios, sino que el volumen de negocios resultó prácticamente nulo.
Al cierre de los negocios, las pizarras del mercado estadounidense mostraron bajas de US$ 17 y de 17,82 sobre los contratos enero y marzo de la soja, cuyos ajustes resultaron de 516,25 y de 510,01 dólares por tonelada. La posición mayo, que marca el ingreso formal de la mercadería sudamericana al circuito comercial, perdió ayer US$ 19,75 y quedó con un precio de 505,41 dólares.
Como en la rueda de negocios del viernes, el principal fundamento bajista fue ayer el informe mensual de oferta y demanda de granos difundido en el cierre de la semana anterior por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, en sus siglas en inglés). En él, el organismo estimó la cosecha estadounidense de soja en 80,86 millones de toneladas, por encima de los 77,84 millones del mes anterior y de los 78,71 millones esperados por el mercado.
La mayor oferta estadounidense, que sorprende al mercado por ser el producto de en una campaña en la que los cultivos atravesaron la "peor sequía de los últimos 50 años", según las declaraciones de organismos de los Estados Unidos, se sumó a cosechas que se prevén récord en Brasil y en la Argentina (si el clima así lo permite) y a un contexto financiero global inestable que no deja ver con claridad el potencial de los compradores.
Por todos estos factores, ayer los fondos de inversión especuladores liquidaron en Chicago unos 11.000 contratos de soja, equivalentes a poco más de 1,5 millones de toneladas. El dato a tener en cuenta es que estos "impredecibles" operadores aún conservan casi 196.000 contratos, por algo más de 27 millones de toneladas. Un poder de fuego que podría ocasionar nuevas bajas si el clima se torna más amigable con los cultivos de América del Sur.
No hay que descartar, sin embargo, que en las próximas ruedas se produzcan algunas subas en los precios de la soja, producto de movimientos técnicos de los especuladores o de compras de ocasión de quienes ahora pueden adquirir más por menos valor.
En el nivel local, las pocas fábricas que se animaron a hacer ofertas abiertas (a sabiendas de que serían rechazadas por los vendedores) propusieron $ 1850 por tonelada de soja disponible para las terminales de Timbúes y de San Lorenzo, $ 90 menos que el viernes pasado. La Bolsa de Comercio de Rosario señaló que "la rueda transcurrió sin negocios".
La soja de la nueva cosecha se cotizó a US$ 315 por tonelada en la zona de Rosario y a US$ 310 en Bahía Blanca, con quitas de 10 y de 20 dólares respecto de los precios vigentes en el cierre de la semana anterior.
Cereales en retroceso
En Chicago, los contratos diciembre y marzo del maíz perdieron ayer US$ 8,17 y 7,77, en tanto que sus ajustes fueron de 282,66 y de 284,34 dólares por tonelada. Los fondos de inversión extendieron la corriente vendedora al mercado del cereal, donde liquidaron 18.000 contratos, equivalentes a casi 2,3 millones de toneladas. En este caso, los especuladores conservan unos308.000 contratos, por poco menos de 40 mill./t.
Luego de concretar importantes compras durante la semana pasada, los exportadores que operan en el mercado local ayer ofertaron 195 dólares por tonelada de maíz con entrega en diciembre sobre Punta Alvear y sobre San Martín, 3 dólares menos que el viernes. Por cereal de la próxima cosecha, que el viernes se cotizó a US$ 208 en la zona de Rosario y a US$ 215 en Bahía Blanca, no hubo propuestas.
En el Matba, las posiciones diciembre y abril del maíz retrocedieron US$ 2 y 4,70, mientras que sus ajustes fueron de 195,50 y de 203,10 dólares por tonelada.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los consumos pagaron 850 y 920 pesos por tonelada de maíz forrajero con entrega entre hoy y el viernes en Chacabuco y en Baradero, respectivamente.
Acerca del trigo, el contrato diciembre en Chicago y en Kansas bajó ayer US$ 10,57 y 11,66, en tanto que su ajuste resultó de 315,17 y de 327,21 dólares.
En el nivel local, los exportadores ofrecieron US$ 230 por trigo con entrega en enero sobre Bahía Blanca y sobre Necochea, 15 y 5 dólares menos que el viernes. En Punta Alvear, en cambio, el cereal para abril se cotizó a US$ 253, con un alza de 3 dólares.
Foto: Martín. G. Álzaga