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Por Dante Rofi 

Los precios de la soja volvieron a cerrar en baja ayer, tanto en la Bolsa de Chicago como en el mercado disponible local. En la plaza estadounidense, la tónica negativa (comprendió también al maíz y al trigo) tuvo que ver con un combo bajista conformado por las activas ventas de los fondos de inversión; el avance de la cosecha; la caída del valor del petróleo; el retroceso de los principales indicadores bursátiles, y con la depreciación del euro respecto del dólar.

Al cierre de los negocios del día, las pizarras de Chicago mostraron quitas de US$ 14,15 y de 14,70 sobre los contratos noviembre y enero de la soja, cuyos ajustes resultaron de 577,98 y de 578,44 dólares por tonelada. Con las nuevas bajas, en lo que va de septiembre estas posiciones acumulan pérdidas del 10,45 y del 10,09% respecto de la última rueda de agosto, en la que los precios fueron de 645,41 y de 643,39 dólares, respectivamente.

Ante la ausencia de nuevas noticias alcistas y la necesidad concreta de cubrir pérdidas en el sector financiero, ayer los especuladores liquidaron unos 10.000 contratos de soja, equivalentes a 1,38 millones de toneladas. Como se señaló anteayer en este mismo espacio, los fondos de inversión aún conservan unos 200.000 contratos, por lo que no habría que descartar nuevas ventas en las próximas ruedas.

Esas ventas tendrán más chances de concretarse si, como ayer, el euro se continúa depreciando contra el dólar (la relación pasó de 1,2904 a 1,2868) y el petróleo extiende su racha bajista (varió de 91,37 a 89,98 dólares por barril. De igual modo, la liquidación de contratos podría acentuarse si las condiciones climáticas continúan favoreciendo la siembra y la posterior evolución de los cultivos en América del Sur.

Por el contrario, las posibilidades de alzas (sobre precios que aún son muy altos) comienzan a quedar limitadas a eventuales contingencias climáticas en Brasil, la Argentina y en Paraguay, países que -a los ojos del mercado- tienen a su cargo la responsabilidad de compensar las pérdidas productivas registradas en el hemisferio Sur durante el ciclo 2011/2012 y en los Estados Unidos en la actual campaña.

Así, los pronósticos auguran altas probabilidades de volatilidad en el corto y mediano plazo, por lo que se recomiendan coberturas en los mercados de futuros y opciones, a fin de poner a resguardo la inversión y márgenes de rentabilidad lógicos.

En el mercado doméstico, ayer las fábricas pagaron $ 1870 por tonelada de soja disponible sobre Ricardone, Timbúes, San Martín, General Lagos y sobre San Lorenzo, $ 20 menos que anteayer. Si bien no hubo propuestas abiertas por oleaginosa de la próxima cosecha en la Bolsa de Comercio de Rosario, en operaciones por fuera de la entidad se habrían ofrecido 335 dólares, 5 menos que el martes.

Las posiciones noviembre y mayo de la soja en el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba) perdieron US$ 8 y 8,30, mientras que sus ajustes fueron de 413,80 y de 335,50 dólares por tonelada.

Cereales, en retroceso

Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron bajas de US$ 7,48 sobre los contratos diciembre y marzo del maíz, cuyos ajustes resultaron de 285,32 y de 286,80 dólares por tonelada. En lo que va de septiembre, estos contratos acumulan pérdidas del 9,41 y del 9,16% frente al cierre de agosto, de 314,96 y de 315,73 dólares por tonelada, respectivamente.

En el caso del maíz, las ventas de los especuladores sumaron ayer 12.000 contratos, por poco más de 1,50 millones de toneladas. Un volumen insignificante frente a los cerca de los 310.000 contratos que aún conservan los fondos de inversión.

Por maíz argentino de la nueva cosecha los exportadores ofrecieron ayer US$ 180 por tonelada en Timbúes, sin cambios, y US$ 185 en Bahía Blanca, con una baja de 5 dólares. En el Matba, la posición abril retrocedió US$ 5,50 y cerró la rueda con un valor de 187,50 dólares.

Acerca del trigo, el contrato diciembre en Chicago y en Kansas perdió ayer US$ 6,34 y 6,06, en tanto que su ajuste fue de US$ 319,40 y de 328,68 por tonelada, respectivamente.

En el mercado local, por trigo disponible los exportadores ofrecieron US$ 220 en Bahía Blanca y US$ 230 en San Martín y en Arroyo Seco (sin descarga). El trigo nuevo se cotizó a US$ 250 en Bahía Blanca y en San Martín, y a US$ 235 en Necochea, sin cambios.

Los molinos ofrecieron entre 930 y 1370 pesos por tonelada de trigo.

Foto: Martín. G. Álzaga