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Por: Ricardo Baccarín

Los datos recientemente revelados por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) confirmaron los anticipados por varios especialistas privados que ya proyectan un importante fracaso en esta campaña norteamericana.

La producción de maíz estimada por el USDA para Estados Unidos solamente alcanzará los 329,4 millones de toneladas, en comparación con los 375,7 millones revelados el mes anterior y los 313,9 millones de toneladas de la campaña previa.

Los rendimientos proyectados se ubican ahora en 9.163 kilos por hectárea, cuando el mes pasado alcanzaban los 10.420 kilos.

En soja, el panorama también resulta desolador, con una proyección de 83 millones de toneladas, comparados con los 87,2 millones de toneladas revelados el mes anterior y los 83,2 millones de toneladas de 2011. Los rendimientos caen en este informe a 2.723 kilos por hectárea, en comparación con los 2.952 kilos del informe del mes de junio.

Reacción positiva

El informe del USDA fue objetivamente alcista y la reacción instantánea del mercado fue positiva, aunque las cotizaciones languidecieron luego, con el correr de las horas, lo que hizo suponer que varios operadores esperaron el informe con posiciones de compra abiertas, y que tuvieron que ser realizadas en esa jornada.

Los fundamentos del mercado, y en la medida en que la tendencia climática no se revierta, siguen siendo constructivos, aunque no hay que soslayar que la demanda observa esta suba con preocupación y podría retraerse, aunque a la luz del registro de ventas semanales de exportación de Estados Unidos este dato aún no se confirma.

Se intentan establecer paralelismos entre esta sequía norteamericana y la acontecida en el curso de 1988. Aquella resultó, al menos hasta el momento, peor que la actual, dada la escasa humedad en el momento de la implantación de los cultivos de verano. Los rendimientos promedio obtenidos en maíz en aquella campaña apenas alcanzaron los 5.335 kilos por hectárea. Aun así, los rendimientos proyectados por el USDA en este último informe resultarán los más bajos desde 2003.

Los datos de compras domésticas de maíz en Estados Unidos para la elaboración de etanol han declinado en las últimas semanas, como consecuencia de la abrupta suba en los precios, al nivel más bajo desde 2010, lo que estaría indicando que algún racionamiento en esta industria se está llevando a cabo.

En el informe semanal de commodities del Deutsche Bank se comenta esta circunstancia y los especialistas añaden que, a pesar de seguirse confirmando bajos rendimientos de maíz en la campaña norteamericana, el sector avícola también se contraerá por efecto de mayores precios.

También, la situación financiera global, como consecuencia de la fuerte crisis que atraviesa la eurozona, ha dejado a los granos como los únicos commodities que han podido sortear estas dificultades, a pesar de un dólar que volvió a registrar los precios más altos de los últimos dos años.

Superado el informe, que por otra parte revela la situación de los cultivos reinante al 1 de julio, con diez días posteriores de clima seco y temperaturas elevadas, la plaza vuelve a concentrarse en los pronósticos meteorológicos. Se descuenta, entonces, un probable recorte en los rendimientos en el curso del próximo informe, probablemente con mayor énfasis en el cultivo de maíz.

El informe semanal sobre el estado de los cultivos en Estados Unidos, reporte aguardado cada lunes con ansiedad por el mercado de granos, consignaba que el maíz en situación «buena a excelente» llegaba al 31%, comparado con el 40% de la semana anterior y el 66% del año pasado a esta fecha.

Ya se encuentra polinizado el 71% de los cultivos implantados, comparado con el 50% de la semana anterior y el 36% del promedio de esta actividad en los últimos cinco años.

En soja, los cultivos en situación «buena a excelente» alcanzan al 34%, en comparación con el 40% de la semana anterior y el 64% del año 2011.

Como se observa, el deterioro de las últimas semanas en el cinturón sojero y maicero estadounidense resultó destacable. Por esta razón varios analistas privados se anticipan a proyectar rendimientos finales sustancialmente inferiores a los revelados por el USDA en su último reporte.

En este sentido, el grupo Fintec, con sede en Florida, Estados Unidos, estima que de no mediar mejoras en el clima en las próximas dos a tres semanas, se podrían registrar rendimientos de entre 7.530 y 7.845 kilos por hectárea en maíz y de entre 2.152 y 2.286 kilos de hectárea en soja.

Los especialistas consideran que el daño productivo en esta campaña se está manifestando a un ritmo muy marcado. Los fondos y especuladores ajenos a la actividad comercial no han tomado aún debida cuenta de esta realidad, subestimando las actuales condiciones. El Fintec Group destaca que, de no mediar cambios en el actual escenario climático, se podría concretar un abandono de área de alrededor de 3,6 millones de hectáreas.

Foto: Martín. G. Álzaga